jueves, 18 de enero de 2018

cuatro miradas a la santa cena

Cuatro miradas a la Santa Cena 
Debemos observar la Santa Cena en el propósito por el cual fue instituida.
La Cena del Señor trae bendición y no castigo. ¿Cuál es la actitud correcta que el creyente debe tener hacia la Santa Cena?
1 Corintios 11:23-34 
Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;
1Co 11:24  y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.
1Co 11:25  Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí.
1Co 11:26  Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.

Tomando la Cena indignamente

1Co 11:27  De manera que cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.
1Co 11:28  Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa.
1Co 11:29  Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.
1Co 11:30  Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen.
1Co 11:31  Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados;
1Co 11:32  mas siendo juzgados, somos castigados por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.
1Co 11:33  Así que, hermanos míos, cuando os reunís a comer, esperaos unos a otros.
1Co 11:34  Si alguno tuviere hambre, coma en su casa, para que no os reunáis para juicio. Las demás cosas las pondré en orden cuando yo fuere.

 Mateo 26:26-30
Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
Mat 26:27  Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
Mat 26:28  porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.
Mat 26:29  Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.

El valor de la experiencia depende de la condición de los corazones de quienes participan; y este era el problema en Corinto.
· Es algo serio venir a la Comunión con un corazón no preparado.
· También es una cosa seria recibir la Cena de manera descuidada.
· Debido a que los corintios habían estado pecando en su observación de la Cena del Señor, Dios los había disciplinado. "Por esta causa muchos son débiles y enfermizos entre ustedes, y muchos duermen [han muerto]" ( 1 Cor 11:30 ).
La Cena del Señor nos da la oportunidad de crecimiento espiritual y bendiciones si nos acercamos a ella en la actitud correcta.

¿Qué debemos hacer si la Santa Cena es para bendición y no para castigo?
1.       En primer lugar debemos ver hacia atrás.  Debemos recordar que ÉL MURIO.
a.       A muchos no nos gusta recordar la muerte de nuestros seres queridos. Siempre pensamos en ellos, y nos acordamos de momentos gratos que pasamos.
b.      Pero Jesús quiere que recordemos su muerte. ¿por qué?
·         Porque todo lo que tenemos como cristianos se centra en la muerte de Cristo.
1 Corintios 15.3-4 Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras;
1Co 15:4  y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras
·         No es la narración de su vida o sus enseñanzas que salvarán al pecador, sino La misma muerte de Cristo.
·         Por eso debemos recordar el porqué de su muerte: ÉL murió por nuestros pecados, ÉL fue nuestro substituto. 
Isaías 53:6  Todos nosotros nos descarriamos como ovejas,(E) cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
1 Pedro 2:24 quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados
·         ÉL pagó la deuda que nosotros no podíamos pagar.
c.       Jesús quiere que recordemos cómo ÉL murió.
·         Voluntariamente, mansamente, mostrando siempre su amor por nosotros.
Romanos 5:8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
·         ÉL entregó su cuerpo en manos de hombres malvados.
·         ÉL llevó sobre sí los pecados de todo el mundo.
d.      Lo más importante es que este “recordar” no es simplemente traer a la mente hechos históricos. Sino que debemos participar de verdades espirituales. Cuando estamos a la mesa con Cristo, no debemos ser admiradores pasivos, sino participantes activos en una relación con un Salvador vivo, a quien hemos alcanzado con nuestro corazón solamente por la fe en ÉL mismo.
2.    En segundo lugar, tenemos que mirar hacia adelante (v. 26 b). Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
a.       Observamos la Cena "hasta que Él venga." El regreso de Jesucristo es la bendita esperanza de la iglesia cristiana y el individuo.
b.      Jesús no sólo murió por nosotros, sino que también resucitó y ascendió al cielo, y un día volverá a llevarnos al cielo.
c.       Hoy en día, no somos todo lo que deberíamos ser, pero cuando le vemos a Él, "vamos a ser como él" (1 Juan 3:2). Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.
3.    En tercer lugar debemos ver por dentro de nosotros.
1corintios 11:27-28 De manera que cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.
Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa.
1corintios 11: 31-32)  Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados;
1Co 11:32  mas siendo juzgados, somos castigados por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.
a.       El apóstol Pablo no dice que debemos ser dignos de participar de la Santa Cena. Sino que dice que debemos participar de una manera digna.
b.      Una vez un pastor notó que una señora de la congregación no aceptó el pan que le ofrecía el diacono para participar de la Santa Cena. En lugar de eso, ella soltó en llanto. El pastor, dejó el púlpito y fue hasta donde ella y le dijo, “acéptalo mi amada hermana, es para pecadores”… De hecho lo es.  Es para pecadores salvados por la Misericordia de Cristo. Pero los pecadores salvados por la gracia de Dios no deben tratar a la Santa Cena de una manera pecaminosa.
c.       Si hemos de participar de una manera digna, debemos examinar nuestro corazón; juzgarlos y confesarlos al Señor.
d.      Llegar a la mesa de la Santa Cena sin confesar nuestros pecados, es hacernos culpables de la muerte de Cristo, de su cuerpo y de su sangre.
e.      Fue por nuestros pecados que Cristo fue clavado en una cruz, y acercarnos a él sucios, mal olientes a pecado, es participar de los que lo crucificaron y echar sobre ÉL más peso y culpa por el pecado.
f.        En cambio, si confesamos nuestros pecados y nos arrepentimos, apartándonos de los pecados, participamos de Cristo y de la salvación. Confesando y juzgando nuestros pecados con la sangre de Cristo, para que en el fin del tiempo no se Cristo mismo quien juzgue nuestra vida por nuestros pecados, sino por SU sangre hallada en nuestro corazón.
4.    Finalmente debemos mirar alrededor.
1corintios 11:33-34)
a.       Debemos mirar alrededor no para criticar a otros creyentes sino para discernir el cuerpo de Cristo. (v.29). Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí
b.      Quizás este discernir tiene dos significados. El cuerpo representado en el pan, o también el cuerpo representado en la iglesia.
c.       La Santa Cena debe ser una demostración de la unidad de la iglesia
1corintios 10:17. Siendo uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.
De hecho la celebración de la Santa Cena en la iglesia de Corinto, era una demostración de la desunión de la iglesia.
d.      Es el propósito de Dios que todos seamos una sola familia. Y en la familia de Dios, debemos amarnos el uno al otro. Es imposible amar a Dios y no amar a quien Jesucristo dio su sangre por él.  1 Juan 4:11 Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.
e.      El tiempo de la Santa Cena, si bien es cierto para confesar nuestros pecados y ponernos a cuentas con Dios y con los hermanos; no debe ser un tiempo de “autopsia espiritual”. Más bien debe ser un tiempo de “dar gracias” – Jesucristo lo hizo así “habiendo dado gracias”….  aun cuando él sabía que en poco tiempo más iba a sufrir el castigo por el pecado de todos nosotros.

1Co 10:15  Como a sensatos os hablo; juzgad vosotros lo que digo.
1Co 10:16  La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo?(K)
1Co 10:17  Siendo uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.
1Co 10:18  Mirad a Israel según la carne; los que comen de los sacrificios, ¿no son partícipes del altar?(L)
1Co 10:19  ¿Qué digo, pues? ¿Que el ídolo es algo, o que sea algo lo que se sacrifica a los ídolos?
1Co 10:20  Antes digo que lo que los gentiles sacrifican, a los demonios lo sacrifican, y no a Dios;(M) y no quiero que vosotros os hagáis partícipes con los demonios.
1Co 10:21  No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, y de la mesa de los demonios.
1Co 10:22  ¿O provocaremos a celos al Señor?(N) ¿Somos más fuertes que él?

 by: Celso Recinos

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